domingo, 28 de abril de 2013

Clínica de la lectura


La Clínica es la lectura
Por Marcelo Esmoris

Comencemos a pensar la llamada clínica psicoanalítica con cuestiones cruciales que dividieron bien las aguas con respecto al campo de las ciencias. Por eso considero que hay que ser muy cuidadoso en función de cómo ubicarse respecto a lo que llamamos clínica. Es bastante peligroso usar toda la terminología médica para hablar de clínica, (paciente, consultorio, historia clínica, etc). El significante, la palabra necesariamente desvía. Hay que efectuar reflexiones muy precisas para poder dar curso a lo que principalmente considero con Lacan a saber: que la práctica clínica del psicoanálisis es exclusivamente una práctica de la lectura.

Observemos que este carácter propio de la lectura es el principal rasgo diferencial del humano con respecto a los animales.
Es cierto que nacemos prematuros, con lo cual estamos a la deriva respecto a que no nos enteramos que quedamos a expensas del Otro sino en un tiempo lógico mas o menos tardío. Y claro que si no fuera por esa intermediación la muerte sería nuestro único destino. Sin embargo ese mundo en el cuál comenzamos, es un mundo cargado de sonidos, flujos verbales, que hacen mella muy rápidamente en el cuerpo.

Quiere decir que la estructura comienza por el lado de las orejas, tan pronto despertamos a estos gritos, ellos, los padres desde siempre no se oyen gritar, ese es el primer impacto de la estructura que agujerea la superficie y permite una primer tensión subjetiva aún antes de poder ejecutar ningún atisbo de escritura. Ya es un principio de lectura, no hay medios para simbolizar ese malentendido, por lo tanto, ya no es la muerte la que nos espera, es el trauma (el trou, agujero, trou-matismo), es la deformación absoluta de la vida, el lenguaje transforma la muerte en vida aunque siempre hay reserva para la muerte, o acaso no sería la muerte lo que hace a la vida vivible y soportable?
Hay trauma, es lo que se llama represión primaria, y no es el trauma del pasaje de la vida intrauterina al exterior planteada por Rank, el trauma es ese agujero en la estructura provocada por el malentendido de los padres y es ese agujero el que va a permitir que tenga lugar en principio lo que Freud llama las teorías sexuales infantiles.
Habrá un paso más muy importante en el advenimiento de un sujeto en el lenguaje que no es sino lo que Freud llamó la estructura del narcisismo. Y es esta estructura la que permite que efectivamente encontremos los medios necesarios para poder leer.

Ahora bien, un analizante viene con una intuición, con algo leído (obviamente no lo dice así), ha leído algo que lo conmociona a tal punto de tener la impronta de querer decirlo. Puede ser cualquier cosa, puede ser que venga de tomar un café con el ex presidente Kirchner, ya fallecido. Y se trata de no poner eso en cuestión, no es un juicio de valor el psicoanálisis, no se trata de discutir si eso es verdad o no, lo más interesante es que el sujeto pueda llegar a escribir las coordenadas lógicas que le permiten anudar tal o cual cuestión, es por eso que es muy importante que el sujeto en la clínica pueda hacer un desarrollo de la escritura para poder lograr leer otra cosa y en todo caso poder hablar mejor.

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