martes, 27 de noviembre de 2012

Desear es trabajar

-->
Pagar para trabajar, trabajar para desear
por Matías E. Domínguez




En la actualidad, se sostiene en forma tácita la siguiente relación: "trabajo=actividad para obtener dinero". Empleo=actividad para obtener dinero, es decir un salario.
Pero, el trabajo es la relación de un sujeto con respecto a un objeto, que se construye en la relación misma, y que al mismo tiempo modifica al sujeto. El dinero no es necesariamente el resultado de un trabajo, ni un trabajo da necesariamente como resultado dinero. Tomo aquí, la noción de objeto de las matemáticas, especialmente a partir de fines del siglo XIX, donde el objeto del matemático es invención de la escritura matemática misma, escritura que se constituye por la práctica del discurso matemático.
Bajtín planteó que la lengua es polifónica. Cuando hablamos siempre estamos citando, aun sin saberlo. En este sentido, trabajar implica reflexionar sobre lo que uno dice; es decir, saber qué es lo que cita, explicitarse las fuentes para hacer una lectura (crítica, en el sentido kantiano).
El trabajo del psicoanálisis es solidario de lo anterior. "Wo es War soll Ich werden", "donde Eso era Yo debo advenir", planteo de Freud. Reconocerme en un discurso que me habita como extraño, pero que al mismo tiempo yo habito, y por lo tanto constituyo. Este movimiento implica poner en juego el narcisismo, el sujeto se toma como objeto. En el mismo sentido, invierte la proposición al principio comentada : « trabajo=actividad por la cual hay que pagar para realizarla ». De esta forma el sujeto recupera el trabajo, del cual es separado a cambio de recibir dinero. La tarea analizante, implica entonces dejar de ser asalariado para devenir trabajador.
La noción de discurso es solidaria de la de sujeto, y la de polifonía de la lengua. Un sujeto no "tiene" un discurso, un discurso tiene a un sujeto, lo sujeta. Está en el deseo de cada sujeto reconquistar su posición discursiva, es decir no ser mero efecto de un discurso, sino practicarlo ; y por tanto devenir deseante, ya que el sentido de todo trabajo es hacer aparecer la verdad que el deseo medio-dice, y por lo tanto trabajar es leerlo.i Recordemos que en los matemas de los discursos, el discurso anaĺitico es el único en donde el sujeto ocupa el lugar del trabajo.
Cuando uno no se reconoce en relación a un discurso y a la polifonía de la lengua, es decir no se reconoce sujeto; se está de lleno en la ideología del capitalismo científico. En cambio, cuando se reconoce la relación a un discurso, pero no se pueden precisar las coordenadas discursivas y las fuentes a las cuales se está relacionado en una situación determinada; se está de lleno en el inconsciente, y entonces... a leerlo.


i
Lacan, Jacques : El reverso del psicoanálisis.

No hay comentarios:

Publicar un comentario